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lunes, 21 de julio de 2014

EL HOMBRE DEL REINO Y SUS DESAFÍOS.



EL HOMBRE DEL REINO Y SUS DESAFÍOS.
Mateo 5:38-44
5:38 Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente.
5:39 Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra;
5:40 y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa;
5:41 y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, vecon él dos.
5:42 Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
5:43 Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
5:44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;


Todos los días hay desafíos para el hombre común y corriente. Muchos inventores del siglo XIX tuvieron desafíos cada día a manera de superar el fracaso de ayer hasta que lo lograron el éxito deseado.
El cristiano tiene desafíos todos los días, especialmente el que es el hombre del Reino de Dios, representado por el esposo en la casa. El hombre del Reino de Dios es el que modela a la familia y modela valores morales, como también disciplina y respeto.  Cómo él es el hombre de la casa, por su autoridad, su respeto, su honra,  no enseña  a que se debiese de idolatrar. El hombre del Reino no se idolatra asimismo ni tampoco idolatra a otros.  Tampoco adora a otro que no sea Dios. El apóstol Juan nos dice de su intención de adorar a un ángel, pero el ángel se lo prohibió, diciendo: "Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos los profetas, y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios" (Apoc. 22:9).
Hay hombres que se idolatran asimismo, que al fracasar en algo, se deprimen fácilmente. Muchos idolatran a jugadores de fútbol, como el caso de Leonel  Messi,  y él mismo se idolatra por todo aquello que recibe de los medios de comunicación: fama, gloria y fortuna. Más veamos el resultado de su recién participación en el torneo mundial 2014, como no alcanzó a meter goles que le permitieran alimentar su gloria, su fama, se deprimió, generando actitudes de un niño caprichoso en el último de los partidos disputados.  ¡No alcanzó su desafío de gloria!
En La Biblia encontramos a un hombre llamado Elías, que un día, su desafío era el de hacer ver al Pueblo de Israel que el único Dios era Jehová de los Ejércitos y ese día mató a 400 profetas Baal. Pero otro día, se levantó sin ese desafío de probar la grandeza de Dios ante los hombres y para el mismo y se deprimió al oír la voz de una mujer que lo amenazó de hacerle lo mismo como había hecho con sus sacerdotes, y salió huyendo a la montaña.  Estamos seguros de que si hubiera habido en su interior un desafío de vencer a una mujer u hombre que amenaze al reino o a su vida, lo aniquila también. Pero fue una mujer que lo amenazó y se atemorizó.
Ahora bien, ¿sabe usted cual es el verdadero desafío para el hombre del Reino de Dios?  Que transcurra el día sin tener peleas o conflictos con nadie mucho menos con su esposa.
Muchos cristianos no llegan a ser hombres del Reino porque han sido influenciados por fuentes que no estaban alineados con Dios. Los medios de comunicación, las escuelas, los hombres.
Se cuenta que los judíos tenían dos escuelas: Shamai y Hiley, por eso el Señor Jesús les enseña algo que ya habían aprendido sus discípulos y los religiosos de aquella época: “Oísteis que fue dicho” cómo también nosotros tenemos una escuela de donde hemos aprendido: la calle, el centro de estudios, los padres de familia, los amigos, etc.  Todos ellos influencian de  alguna manera a cada uno de nosotros y con el paso del tiempo se vuelve nuestro referente.  Es que así lo hacía mi papá, o así lo decía mi papá, así pensaba mi amigo, -así me lo habían dicho, decimos.
Así que el hombre del Reino, tendría que tener su primer  desafío  del día en  levantar a su esposa a su mismo nivel de adoración, de alegría, de gozo y también en aquel nivel de tristeza o de desconsuelo. Así también su segundo desafío será el de decirles una palaba de amor, de cariño a los hijos, una palabra de pertenencia que les ayude a tener plena convicción de que su padre es el mejor. El hombre del Reino abre su corazón para que su esposa le ayude a corregir aquellas áreas grises de su vida a tal grado de que la esposa lo llegue a conocer mejor que él.  Hay esposas que conocen bien a su esposo pero por el lado de afuera o exterior más no por el corazón, no porque ella no le interese, sino que el hombre no le permite llegar hasta su interior. No es que no haya problemas, pero el hombre del Reino pide sabiduría al Espíritu Santo para que pueda callar ante aquel reclamo, observación o corrección que le haga la esposa.  Pero como nos enseñaron mal, algunos de nosotros cerramos el corazón, nadie puede entrar ahí, no le decimos nuestros temores, o desconsuelo o tristezas, porque somos muy machos, sí señor.

Ahora bien, a pesar de todos estos defectos, el hombre del Reino de Dios, se desenvuelve en varios ambientes: la familia, el trabajo, la calle, la iglesia.  Y dentro de todos estos ambientes ¿Quién crees tú que es el peor juez en tu vida?   Tu esposa o los hijos, porque son quienes conocen de adentro de la casa al padre creyente, son  los que ven que en la iglesia eres todo un adorador, un caballero, saluda  a medio mundo, servicial, atento, pero en la casa es todo lo contrario. Por ello sabiendo esto, tenemos que conquistar la peor batalla: CONQUISTARME YO.
¿Qué es lo que Jesús hizo contigo como hombre en la cruz del Calvario?  Dijo Pedro  en su 1ª. Carta 2:9 “Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios,”     Así que el hombre del Reino es un príncipe del Reino, y por lo tanto, su porte, su caminar, su actuar, su vestimenta, su vocabulario, etc, es de un príncipe. Ya no le es permitido tirar la basura en la calle, ya no le es permitido vestirse como harapiento, como mendigo, ya no le es permitido hablar malas palabras. El hombre del Reino muestra sus virtudes en su palacio. Ese palacio es tu casa, tu colonia, tu lugar trabajo.
Así que con lo anterior descrito te damos algunas recomendaciones para modelar como UN HOMBRE DEL REINO:

1.    El hombre del Reino no es pasivo, no es dominante, pues no grita, no controla,  ni piensa que es por su fuerza o por su grito que ordena o tiene autoridad.  Tampoco el hombre del Reino de Dios  no se mide por las mujeres que tiene o por  su virilidad en la cama con su mujer. El hombre del Reino de Dios no es aquel que se mide por el éxito de su empresa, o de su estatus que obtiene por medio de sus finanzas.  Hay hombres que por tratar de obtener dinero, se quedan más de la cuenta en la empresa trabajando, porque quiere más éxito, quiere más dinero y para ello, obliga al empleado a quedarse más del tiempo contratado, a trabajar horas extras y muchas veces sin pagarle lo justo, todo por obtener más y mejores resultados financieros.  ¿Te imaginas que tu esposa fuera aquella persona que se tiene que quedar a trabajar por el bendito deseo de su jefe de que quiere trabajar más de la cuenta? Por culpa de él, la esposa descuida su casa, su esposo, sus hijos.

2.    El hombre del Reino no es irresponsable. Está pendiente hasta la de la mínima mancha de aceite del carro de su esposa, porque no quiere que ella se quede varada en el camino o que la reparación del mismo le salga más caro que el tapar esa fuga. Provee para su casa, su familia.  En otras palabras, el hombre protege a su casa y su familia.  Todos sus bienes están bajo el hombre y no sobre él.  Muchos hombres, en este tiempo se quedaron en otro lugar, viendo los partidos de futbol y le robaron tiempo a su jefe o empresa.  No fue responsable.  El que es responsable  provee descanso a los que están bajo su cargo.
¿Quieres una esposa sana?
Trátala desde hoy, que tenga un descanso durante el día, que pueda darse un momento de relajamiento, pues todo el día ha pasado tensa, afanada por todos los oficios diarios de la casa. Merece un momento de descanso para que no se enferme de los nervios. Tú puedes hacerle reír, y persuadirla a que vaya contigo a dar un paseíto, que te disfrute de un momento no de placer sexual sino de placer de compañero, de amigo que la entiende. El hombre del Reino de Dios ni busca perfeccionar a los hijos porque los va a perder, porque no los aprovecha en los momentos en que puede gozarlos: en su niñez.
3.    El hombre del Reino cuida intencionalmente su vida: Es asunto de él, sus hechos, su vida. No se deja llevar por la vanidad, ni gasta más de lo que tiene.  Hay hombres que hasta por un teléfono inteligente se quedan sin comer por tenerlo, descuidando su propia vida y la de los de su casa.
4.    El Hombre del Reino, no piensa sólo en el sexo.  No basa su masculinidad en cuantas veces hace el amor a su esposa, ni cuantas mujeres tiene porque dicen: -si Salomón tuvo mil mujeres, ¿porqué no yo?, sino que busca ese equilibrio en su pareja, buscando satisfacer a su pareja y no satisfacerse él.

Cuando hemos visto todo lo que hemos dicho de lo que es un hombre del Reino, y si nos pasamos una lupa  a nosotros mismos, descubrimos que en la casa, aparentemente hay un hombre, pero en realidad es un niño o un inmaduro. La niñez se caracteriza por la inmadurez y por depender de alguien.
Aquel varón que depende de su esposa para proveer a su casa, es todavía un niño. Aquel varón que busca a otro para que se haga cargo de sus desastres, es un niño. Aquel varón que quiere qe sus frijoles licuados vayan hasta colados para que no lleven la hollejos , te imaginas el trabajo de aquella mujer, éste sigue siendo un niño.
El hombre del Reino de Dios, tiene que ser un hombre con mente creativa, con la mente de Cristo, dispuesto a liderar a su familia, a un pueblo, a una congregación.  Cuando Dios mandó a matar a todo primogénito de las familias de Egipto, incluyendo a la familia real, fue para hacerle saber a todo el mundo, que matando a esta nueva generación, quedarían sin lideres con ideas creativas, y hasta el día de hoy sigue siendo Egipto un país sin verdaderos líderes, y siguen siendo como inmaduros o niños que no pueden llegar a ser cabeza, sino siendo cola. 
Dios tiene algo nuevo y poderoso para el hijo de Dios, siga procurando ser un hombre del Reino, haciendo de su familia una familia fuerte. DIOS TE  BENDIGA.

Roberto González, pastor

martes, 26 de junio de 2012

SI AMAS A DIOS, AMA LAS COSAS QUE EL AMA Y ABORRECE LO QUE EL ABORRECE

SI AMAS A DIOS, AMA LAS COSAS QUE EL AMA Y ABORRECE LO QUE EL ABORRECE
Proverbios 6:16-19

6:16 Seis cosas aborrece Jehová, 
Y aun siete abomina su alma: 
6:17 Los ojos altivos, la lengua mentirosa, 
Las manos derramadoras de sangre inocente, 
6:18 El corazón que maquina pensamientos inicuos, 
Los pies presurosos para correr al mal, 
6:19 El testigo falso que habla mentiras, 
Y el que siembra discordia entre hermanos. 



Pensando en esta meditación, me llega a la mente la época de enamorados o de recién casados que pasa todo ser humano, en donde el romance, el sometimiento, las palabras dulces están a flor de piel, como se dice en mi pueblo. Nadie quiere hacer lo más mínimo para hacer sentir mal a la otra persona, porque decimos que la amamos. Cada quien conoce lo que le gusta o lo que no le gusta. Hacer aquello que no le gusta es sinónimo de pleitos, de enojo, etc. Pues bien algo parecido quiero tratar con esta porción de la Biblia que hemos puesto como base.
Si tú amas a Dios, y le conoces, y sabes que es lo que no le gusta….¿te gustaría hacerlo sentir mal?  ¿Te gustaría hacerlo llorar?  Creo que si en verdad lo amas o tienes identidad con El Reino o de pertenencia, no lo harías.

Es bueno la retroalimentación y es bueno poner en práctica el entendimiento de lo que Dios no quiere que hagamos, porque él lo aborrece. Veamos entonces, La Palabra:

1.     A Dios no le gusta las personas que tienen ese “espíritu de orgullo”.
Como hijos de Dios no debemos ser cómplices del enemigo y mostrarnos orgullosos porque tenemos mejor empleo, porque tenemos más dinero, porque somos los “jefes” y nos deben pleitesía, etc.
Abundan en el mundo muchas personas con esté espíritu, alimentado por el espíritu de mentira, pues viven engañados que ellos solitos pueden hacerlo todo, que con su dinero pueden arreglarlo todo, que con su inteligencia lo pueden resolver todo, más se olvidan de Dios.
Nos cuesta perdonar, es porque somos altivos, nos mostramos heridos y no queremos fácilmente dar el brazo a torcer.  Aborrece ese espíritu que puedas descubrir que te puede estar influenciado o que está en otras personas. No es a la persona el rechazo, es a ese espíritu altivo.
Date cuenta si eres altivo:
a.      Si pides las cosas y no dices “por favor” ni mucho menos das las gracias
b.      No escuchas consejos, de un joven o de un niño. Ellos hablan también con sabiduría.
c.      Quieres que te sirvan buena comida, porque “lo mereces”, porque eres hijos de Rey.
d.      No saludas a nadie donde vas caminando
e.      No pides perdón cuando te has equivocado
f.       Rompes las reglas porque eres el jefe o el que manda
g.      No llamas por teléfono a tus amigos, tú esperas ser llamado.
h.      No te bajas a la llanura, porque estás acostumbrado a sólo estar arriba, como en pedestal.
i.         Ves a las demás personas de menos, y te crees muy importante no teniendo nada.
Y hay tantos y tantos que espero en el Señor puedas analizarlos y parar de seguir siendo “altivo”

2.     A Dios no le gusta las personas que tienen el hábito de mentir Ver. 6:17
Amando a Dios, le mentimos. En anteriores ocasiones hemos mencionado que le enseñamos a nuestros hijos a mentir indirectamente, pues en ocasiones ellos han mentido por instrucciones nuestras: “Dile a tal persona que no estoy”, “si llaman preguntando por mi, di que he salido y que no sabes a que hora volveré, etc.
Algunas personas que son comerciantes declaran menos ventas para pagar menos impuestos, mintiendo y desobedeciendo el mandato de Dios: “dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”  Lucas 20:25
También hay muchos hermanos que dicen que “hablan con Dios”, pero sus acciones o sus reacciones en el momento de pruebas es muy distinto a lo que hablan. Dicen ser profetas y no lo son.
En principio, mentir está prohibido por Dios desde los tiempos de Moisés y  trae maldición a quien lo practica.
Si alguna vez te preguntaran de algo y no lo sabes, dilo con franqueza, la gente te valorará por eso.
Si en alguna ocasión te ves tentado a mentir, di con viva voz “aléjate y échate al mar espíritu de mentira” y si lo crees, verás que no habrá necesidad de responder porque nadie te va preguntar de lo que temías  te iban a preguntar.

3.     A Dios no le gusta aquellas personas que matan a  gente inocente, el caso de los pandilleros, el caso de niños abortados.
Me acuerdo que en los tiempos de mis abuelos uno caminaba por las carreteras, aquellas eran muy solitarias, eran el invento del siglo, pues la mayoría e los caminos eran rurales, polvosos, empedrados y en esas calles, era bien raro, pero raro, el encontrar una cruz enterrada a la orilla del camino. Preguntaba de niño que porqué esa cruz y me decía mi abuela: Es porque alguien murió, lo asesinaron para robarle.  Ahora es común encontrar en basureros, quebradas, en las calles principales cadáveres de muchachos de 15-20 años, asesinados algunas veces por rivalidad entre pandillas, otras veces por venganza, con niños o jóvenes que nada tenían que ver con asunto de pandillas.
Matan por matar, por diversión, como si fuera temporadas de cacerías..
Pero no necesariamente tiene que ser por heridas físicas, el que alguien mate a otra persona, sino cuando hay palabras venenosas que matan el espíritu interior de la persona, como sembrar desánimo, discordias, dudas,  como cuando a alguien se le descubre una verdad que aún no era el momento, porque era muy niño, porque no era la persona adecuada para contar cual y tal cosa.  Dijo Dios, “Y no temáis á los que matan el cuerpo, mas al alma no pueden matar: temed antes á aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno.”  Mateo 10:28
Recuerdo cuando a mis 8 años despertaron en mi un cierto rencor contra aquella persona que me adoptó como su hijo y que sin saberlo, yo pensaba que era mi mamá biológica, pero una hermana de ella, me dijo que yo no le obedeciera a ella, porque me corregía, pues ella no era mi madre. Me dolió mucho, pero ahora reconozco que era la persona que mucho me quiso, porque me lo demostró con vara, con preocupaciones, con llanto en sus ojos cuando me enfermaba, etc.


También cabe el repudio que debemos de tener los cristianos a todos aquellos que hacen aborto en muchachitas de 13,15  años.. Yo les llamaría seudo médicos que se prestan a hacer ese trabajo sucio, cuando Dios aborrece a las persona que matan a los niños, a los herederos del Reino, en ese estado. También Dios odia a a aquellos que  ponen a los niños como escudos humanos para que no les desalojen o para que no les ataquen
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4.     A Dios no le gusta ver a su creación pensando como hacer el mal, o pensando cosas bochornosas
Si algo le place Dios es que usemos nuestra mente en ser creativos, tal como él lo es. Pero algunas veces apartamos tiempo para pensar en como hacer algo malo.
La iniquidad significa torcer el camino. Si siendo conocedores de lo que no le gusta a Dios, nos ponemos a maquinar planes de traición, de robo, de mentir, de llegar tarde a una cita convenida, de levantar calumnias,  de cómo levantar a una joven o viceversa para conquistarla, etc.  El pensar en maldad es sinónimo de que tienes mucho tiempo holgado, en la cual media vez te pongas “relajado” saldrán pensamientos de mal. Entonces quedas embarazado del pecado hasta que das a luz, es decir hasta que lo consumes. Mira lo que dice Santiago 1:15 “Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte”
Porque Dios no nos quiere muertos espirituales sino vivos espirituales.

5.     A Dios no le gusta ver a su creación correr para hacer lo malo Prov. 6:18b
Dice el Proverbio 7:22 “Al punto se marchó tras ella,  Como va el buey al degolladero,  Y como el necio a las prisiones para ser castigado;” 
Así nos vemos cuando somos presa de este espíritu para hacer lo malo. Vamos como espíritu sin rienda y terminamos mal. Y esto se ve especialmente en los jóvenes. Nuestro propios hijos pueden estar en peligro de caer, por pasiones juveniles a las cuales no les hemos parado de raíz, por ser tolerantes con sus amigos o con malcriadezas.
Pongo de ejemplo cuando hay algún accidente, todo mundo corre a ver, no para ayudar precisamente, y se quedan hablando más de la cuenta, pero para correr a hacer lo bueno, nadie, todos caminan despacio.
El tener citas, siendo casado, el acompañar a otros a una fiesta mundana, el ir en pos de riquezas ilícitas no le es bueno a nadie.

6.     A Dios no le gusta oír a su creación hablar cosas falsas. “El testigo falso que habla mentiras”….
Si alguna vez te dicen “ven, quiero que seas mi testigo y di esto y esto, cosas que no son, no lo hagas. Prestarse a este juego es también hacer enojar a Dios.
Si aún jurando diciendo la verdad es condenación, según Santiago 5:12 “Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación.” Entonces, si testificamos con  mentiras, ¿Cómo quedaríamos antre Dios?

7.     A Dios no le gusta ver a sus hijos sembrando discordia entre la misma familia. ….“Y el que siembra discordia entre hermanos.”
Algunas veces nos equivocamos como siervos, como hermanos en Cristo y dañamos a las personas, de eso no hay duda, pero debemos de aprender a pasar por alto la ofensa, y cuesta su tiempo, cuestan lágrimas de sangre decía un amigo por ahí.
El hermano resentido que le quitan privilegios, siembra discordia con el otro que queda sirviendo; el hermano que dice que tiene  la verdad, se encarga de decir a todo el mundo lo malo de la otra persona, del pastor, del diácono, en fin, a tal grado que algunos le hacen caso y sudan calentura ajena, dejan de ir a la iglesia.
También hay hermanos que pelean el puesto del pastor, ¡si supieran los problemas que se enfrentan como tal! Y ya quisiera yo que me dijeran ¡deme el puesto!, pero en buena lid, y claro, si Dios me da el aval, yo se los doy,  pero no, se les posiciona el espíritu de Absalón y se ponen a hablar o rumorar en contra de el líder, en contra del jefe, en contra del patrón, etc.
Si nos damos cuenta todas las anteriores situaciones, vienen sostenidas por la mentira, que nos hace creer que somos los más importantes, que nos hace mentir piadosamente, que hacemos un bien matando a niños en forma de feto, o matando jóvenes de temprana edad, que nos hace torcer el camino de santidad donde Dios nos ha puesto, pues decimos una canita al aire no es pecado”, que no nos va a pasar nada si vamos corriendo a caer en brazos de la amante o del amante, que no nos va pasar nada por dar falso testimonio, porque lo hemos hecho otras veces y nada ha pasado…que tenemos que decirle a medio mundo en honor de la verdad, porque somos santos, porque no toleramos el pecado, y nos encargamos de destruir lo bueno que ha levantado aquella persona, si te das cuenta, hemos cambiado la verdad por la mentira y eso si aborrece Dios.  Romanos 1:25 nos dice “ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.

Si Dios aborrece estas siete cosas, también debemos de procurar no tenerlas como aliadas bajo ninguna circunstancias. Dios es siempre fiel y él sabe en que momentos fallamos, pero debemos de acudir a él. A mirar su rostro, a pedir perdón y comenzar de nuevo, lo importante es que ya hemos avanzado mucho desde que él nos aceptó como hijo.  Espero te ayude esta reflexión y edifiquemos una buena familia biológica como espiritual.  Un abrazo fraternal.  Bendiciones.

viernes, 27 de enero de 2012

El Porqué de Los Detalles


El Porqué de Los Detalles
Ezequiel 40:4-10
40:4 Y me habló aquel varón, diciendo: Hijo de hombre, mira con tus ojos, y oye con tus oídos, y pon tu corazón a todas las cosas que te muestro; porque para que yo te las mostrase has sido traído aquí. Cuenta todo lo que ves a la casa de Israel. 
40:5 Y he aquí un muro fuera de la casa; y la caña de medir que aquel varón tenía en la mano era de seis codos  de a codo y palmo menor; y midió el espesor del muro, de una caña, y la altura, de otra caña. 
40:6 Después vino a la puerta que mira hacia el oriente, y subió por sus gradas, y midió un poste de la puerta, de una caña de ancho, y el otro poste, de otra caña de ancho. 
40:7 Y cada cámara tenía una caña  de largo, y una caña de ancho; y entre las cámaras había cinco codos de ancho; y cada poste de la puerta junto a la entrada de la puerta por dentro, una caña. 
40:8 Midió asimismo la entrada de la puerta por dentro, una caña.
40:9 Midió luego la entrada del portal, de ocho codos, y sus postes de dos codos; y la puerta del portal estaba por el lado de adentro. 
40:10 Y la puerta oriental tenía tres cámaras a cada lado, las tres de una medida; también de una medida los portales a cada lado. 

En mi tierra salvadoreña, hay personas que cuando no tienen mucha inteligencia, se dicen a sí mismas “me falta veinte para el peso” haciendo alusión a esa carencia, según ellas. Y al leer porciones de la Palabra de Dios como la anterior, se ven más influenciadas a pensar de que no entienden esa palabra, por  medidas,  salas, puertas, etc.
Pues de la misma manera, en esta ocasión quiero recalcar una vez más como Dios quiere siempre enseñarte como un buen maestro de toda palabra plasmada en el mejor y único libro que te habla de la eternidad: LA BIBLIA. Toda palabra plasmada en ella tiene un propósito específico para el que la lee.

Una vez más recordamos a Ezequiel, que significa “El que me fortalece”, “Aquel que tiene la Fuerza de Dios”  Pues bien, en esta ocasión nos encontramos en el Capítulo 40, en donde Dios lo lleva en visión a lo que es el Templo de Dios, y le dice textualmente:  y pon tu corazón a todas las cosas que te muestro; porque para que yo te las mostrase has sido traído aquí

Más de algún hermano, al  leer porciones de la Biblia destinado a describir medidas, volumen, cantidades, censos, etc, como que no le agrada mucho. Más sin embargo es de ponerse a pensar de que Dios no ha puesto esos “detalles” sólo por ponerlos. Algo hay detrás de cada frase ahí descrito. Y es por ello que queremos motivarte a que pienses con denuedo y pedirle a Dios sabiduría el porque tienes que leer estas porciones.
En la lectura que te traigo como base habla de cañas, muros,  de gradas, de salas, de postes, todo ello bajo la figura de el “Nuevo Templo Para Israel”, que tiene que ver con
el anuncio sobre la restauración del templo del milenio. En esta gran visión el profeta contempla el templo con todos sus detalles: la gloria de Dios, que vuelve al lugar santísimo, la Shekinah que se establece en el lugar santísimo una vez más.”
Así como esos detalles que narra Ezequiel, que vio, “cuenta todo lo que ves a la casa de Israel.” –le dice, sin omitir detalles. Es para el pueblo de Israel, que había estado  en rebeldía, ahora le presenta una vez más la descripción de lo que era el “templo restaurado” orgullo nacional de un pueblo especial entre otras naciones, especial para Dios.
Ahora bien, esa instrucción de hablarles a cada uno de los que leen la Palabra de Dios, es también para nosotros los gentiles, hijos de Dios. Timoteo 3:16-17, expresa: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,  a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.”
Te animo a que prestes atención a cada detalle de la Palabra de Dios, por muy complicada que suene. Leer de medidas, de cantidades, etc. no es en vano. Es porque ahí también hay palabra revelada. Todo lo que Dios pone como evidencia, como prueba, como simbolismo es algo que Dios lo pone por algo…
La  misma Biblia nos dice: “Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido”  Mateo 5:18   Esa jota o esa tilde, puede ser esa palabra “complicada que leíste” y no te diste cuenta. Palabras son esos detalles de sabiduría, de instrucción. Mateo 24:35  nos dice: “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.” Esa palabra es la gloria del Espíritu Santo.
Pon atención y pide sabiduría a Dios, Santiago nos demanda a pedirla cuando nos sintamos que no la tenemos, que nos hace falta. Encuéntrale sabor a la Palabra, sea la que sea, descrita en el  libro de Dios.

Oración:
Amado Padre, te pedimos discernimiento en lo que podamos leer u oír, palabra emanada de tu Santo Espíritu escrito en la Biblia. Queremos seguir caminando contigo, poniendo atención a lo que nos digas. Queremos ser oyentes que retengan lo bueno y poenerlo por obra. Espíritu Santo, dánosle gozo de leer siempre buscando la respuesta a toda duda, a todo dolor, a toda necesidad. Sólo con tu discernimiento oh Espíritu Santo podemos obtener la respuesta de cada palabra. Sabemos que los aman a Dios todas las cosas nos ayudan a bien. En el nombre de Jesús.
Un abrazo fraternal. ¡¡¡BENDICIONES!!!



domingo, 8 de enero de 2012

¿Por Cual Camino Vas?

¿Por cual camino vas?
Prosigo al blanco, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.
Filipenses 3:14





Dice un viejo dicho popular que “Aquel que no sabe para donde va, cualquier bus, tren o avión le sirve”  Es nuestra intención hacer un llamado a la reflexión como dice aquel buen programa del hno. Pablo, hacer un mensaje a la conciencia.
Comenzamos este primer día de enero y es tiempo de hacer siempre un autoexamen y revisar cual es nuestra situación actual. ¿Sabés para donde vas? Y al llegar ¿Sabes cómo estarás? Sea cual sea tu condición en lo físico, en lo material o  espiritual, el ser humano debe de ser hombre de propósitos, pues anhelamos estar bien. Jeremías 29:11b nos dice: “para daros el fin que esperáis.”    Si tú eres un joven, si eres adulto, si eres anciano, todos tenemos roles en este periodo de vida y queremos estar bien, pero algo nos hace falta para que estemos en ese estado.
Una de las razones por las cuales no estamos bien, es porque nos hace falta planificar y organizarnos bien en actividades diarias, como actividades que son de relevancia. Actuamos por inercia o por lógica y Dios quiere que seamos hombres pensantes y planificadores y que nos fijemos metas y tiempo. Es muy romántico y bonito oír “Feliz y próspero año nuevo.”

Pregunto:
  1. ¿Ya compraste tu agenda 2012 para organizar tus actividades, trazar metas y objetivos?
  2. ¿Sabes en que propósitos concretos trabajarás en este año que empiezas?
  3. ¿En qué áreas de tu vida no eres feliz?
  4. ¿Qué tiempo te has propuesto para alcanzar estas metas?
  5. ¿Qué área de tu vida necesita que se moldee más en ti?
  6. ¿Habrás tirado la toalla en algunos de esos objetivos?
  7. Sigues igual que el año pasado? ¡Algo tienes que haber cambiado!

Si sabes para donde vas, sabrás entonces que acciones tomar, si necesitas fondos, recursos humanos, recursos materiales, si necesitas de tiempo, si necesitas de otras personas, etc.
Por ello te escribo estas líneas para darte estos tres puntos que te ayudarán a alcanzar tu meta:
1.      Tener claro tus metas
En el libro de Nehemías encontramos un versículo en donde a Nehemías se le pregunta por su estado de ánimo, por esa carga que él tenía en su corazón y el contesta haciendo referencia a su pesar por la ciudad de sus padres, que alguna vez fue de orgullo para el Pueblo de Israel y ahora ha quedado destruida y asolada. El rey le pregunta a Nehemías: “Me dijo el rey: ¿Qué cosa pides? Entonces oré al Dios de los cielos,” Neh. 2:4  El rey sabía que personaje tenía a su lado y por ello no dudaba que Nehemías tenía bien claro que le pediría.

2.     ¿Que le vas a pedir a Dios?
 Comenzando el 2012 es imperativo que tengas una carga que te haga motivar ese cambio dentro de ti. Si es de carácter espiritual, debes de comenzar pidiendo ser “un odre nuevo” porque lo que Dios te quiere enseñar, según Jeremías 33:3 serán grades cosas y debes de asimilarlo aunque no comprendas el como y el porqué.

3.     Ponle plazo a tus metas y objetivos
Mira lo que a Nehemías le pregunta el rey: ¿ Entonces el rey me dijo (y la reina estaba sentada junto a él): ¿Cuánto durará tu viaje, y cuándo volverás? Y agradó al rey enviarme, después que yo le señalé tiempo. Neh. 2:6
Algunas veces queremos prepararnos más en lo académico, en lo profesional y siempre hemos dicho que es bueno que el hombre se prepare para la gran obra. Por muy mínima que sea tu meta, ponle tiempo. Acá en El Salvador hay un dicho popular “Mañana hago mi casa dijo el zope y no hizo nada” Si vas a estar alejado de la congregación por estudios, por trabajo, sea por lo que sea, tienes que saber que siempre Dios te espera con los brazos abiertos. Una vez logrado el objetivo, debes de regresar a tu casa, donde Jehová envía la bendición.

4.     Saber con exactitud tus gastos e ingreso
Lucas 14:28 Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla? 
No puedes hacer planes sin saber tus costos e ingresos. Aquellos planes que requieren inversión y no hay fondos inmediatos, debemos de hacer algo espiritual, como dice la Biblia, poniendo la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra, (Col. 3:2) esto quiere decir que no nos vamos a meter en gastos creyendo que por fe vamos a salir adelante, porque Dios es Dios de orden y no hay bendición en la confusión, en el desorden donde se sabe cuanto se tiene para pagar la casa, el coche, la luz o el agua.

 5.     Encomienda a Dios toda obra

Proverbios 16:3 nos dice: “16:3 Encomienda a Jehová tus obras, Y tus pensamientos serán afirmados.” No es a base de sabiduría propia, sino a base del favor de Dios. Tú puedes planificar una gran utilidad  financiera para tu empresa o una sobreproducción en tus cultivos, en tus animalitos, de crianza, ¿pero que tal si no hay ventas,  si  no llueve sobre el campo, si no hay viento que haga que la polinización en los árboles se lleve a cabo,  si  viene la peste y acaba con todos tus animalitos? Por muy pequeña que sea tu obra, es bueno decirle a nuestro Dios: Acompáñame mi socio mayoritario y haz que esta obra sea exitosa. Desde que el sol sale hasta que el sol se pone, la voluntad de Dios sea la que se manifieste, no la nuestra.

6.     ¿Caminas hacia  al degolladero?
“Al punto se marchó tras ella,  Como va el buey al degolladero,  Y como el necio a las prisiones para ser castigado;”  Prov. 7:22
Muchos hombres y algunas mujeres caminan  en la calle de la amargura, el mismo camino que lleva el buey. Llega el día en que el buey es sacrificado, sea porque es viejo, porque tiene buena carne, pero llega ese día y camina hacia el matadero, hacia el rastro, y no dice nada, va derechito a la muerte. Así también el hombre o mujer  que pone su mente y su corazón en manos de una persona. Se enamoran perdidamente de alguien que no tiene valor, se acuestan con la primera o primero que le hace ojitos  bonitos o les dicen palabras bonitas, no sabiendo que en ese camino hay destrucción de hogar, destrucción de finanzas, destrucción de familia, de su comunión con Dios. Y lo peor del caso es que se vuelven piedras de tropiezo una y otra vez. Usted lo sabe muy bien que tiene que salir de ese atolladero, pero quiere seguir así, porque el pecado se gloría en usted. Pero le recuerdo lo que dice Génesis 4:7 nos dice “Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él.Tú te puedes enseñorear del pecado. Por tanto, hoy es el mejor tiempo para detenerte  y ver hacia donde vas en este año nuevo. Si no sabes para donde vas, pide ayuda. Si caminas por el mismo camino del fracaso, pide ayuda. Si caminas por el camino del vicio, pide ayuda, si caminas por el camino del éxito, sigue ahí aún con paso lento. Sabrá Dios que si le pedimos ayuda a su Espíritu Santo nos recompensa con la sabiduría e inteligencia.

7.     Siga caminando hacia el blanco, conquiste el monte de Bendición.  Isaías 2:2-3
Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones.
Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.

Mira, no hay mejor recompensa como la paz que te da el Señor en tu familia, en tu vida personal cuando sigues a Cristo y vives para él. Cualquier pasatiempo o diversión que tengas, cualquier medio de ingreso que te da comodidad, cualquier mujer, la más bonita y mejor formada que tengas como amante, o como amiga con derecho, cualquier hombre que puedas tener en que confíes y lo veas como el más guapo, el más romántico, el más potente, en todo el sentido de la palabra,  sea lo que sea, tarde o temprano esto se termina. El mismo mundo le canta al amor y le dice “el amor acaba” pero el amor de Dios nunca acaba para con nosotros, sus misericordias nunca se acaban, pues todos los días nos regala misericordias y sus promesas permanecen para siempre y en el mejor lugar: la familia y en la iglesia. Conquiste el Monte de Dios, buscando a su familia espiritual en su casa donde él lo ha Plantado. Te trajo de una tierra de Egipto y te ha transplantado en esta buena tierra, en la casa de Adonai, en la casa donde te congregas. Créeme, Dios te sonríe cuando te acercas a él.
Declare que en este nuevo año, las cosas serán mejor porque la Palabra de Dios, Dios mismo será su guía y juntos con él caminaremos hacia la “tierra prometida”. Busque a Dios y tendrá recompensa. Busque a Cristo, le garantizo que es el mejor camino que tiene una meta super especial. Dios te guarde siempre.

Roberto González, pastor. 07-01-2012