Se trata de un centro comercial en Niágara, en donde todo el mundo estaba tomándose algo tranquilamente en un día de compras. De repente, una chica de entre la multitud, que parecía estar hablando por teléfono, comienza a cantar el “Aleluya” ante los sorprendidos comensales. Acto seguido, otro chico se levanta y le sigue el ritmo a la canción y luego otro y otro... |
Como pueden imaginar, la multitud allí congregada no podía creer lo que veía y oía que estaba pasando. En un principio se quedaron con la boca abierta; mas, poco a poco fueron reaccionando y sacaron prestos las cámaras de sus móviles para inmortalizar el momento.
Ahí no acabó la cosa; en menos que nada se les unieron más personas. Resulta que 80 miembros del coro de Niágara de Canadá se habían mezclado discretamente entre la gente del área de comidas, para entonar la alabanza a la manera de la música clásica. Tremenda bendición para los ahí presentes.
Lo que parecía un acto espontáneo fue algo que tardó semanas en prepararse. Había que tenerlo todo planeado hasta el último detalle. No podían informarle a nadie en el centro comercial hasta el último momento para que la sorpresa fuese completa. Una pianista que estaba "infiltrada" como encargada de tocar villancicos en el centro comercial fue la que se encargó de dar la señal de salida tocando las primeras notas del “Aleluya”.
“Aleluya” es la palabra que más agrada al Señor. Aleluya: adaptación de la expresión hebrea hallet-lu-Yáh, que significa «¡Alaben a Dios! ¡Gloria al Señor!» y tiene la misma pronunciación en todos los idiomas del mundo. Es la alabaza más antigua y la más universal.
Disfrútenla dando clic al enlace y luego llevarla a “pantalla completa”. Al final, seguramente ustedes también exclamarán… ¡Aleluya!
Ahí no acabó la cosa; en menos que nada se les unieron más personas. Resulta que 80 miembros del coro de Niágara de Canadá se habían mezclado discretamente entre la gente del área de comidas, para entonar la alabanza a la manera de la música clásica. Tremenda bendición para los ahí presentes.
Lo que parecía un acto espontáneo fue algo que tardó semanas en prepararse. Había que tenerlo todo planeado hasta el último detalle. No podían informarle a nadie en el centro comercial hasta el último momento para que la sorpresa fuese completa. Una pianista que estaba "infiltrada" como encargada de tocar villancicos en el centro comercial fue la que se encargó de dar la señal de salida tocando las primeras notas del “Aleluya”.
“Aleluya” es la palabra que más agrada al Señor. Aleluya: adaptación de la expresión hebrea hallet-lu-Yáh, que significa «¡Alaben a Dios! ¡Gloria al Señor!» y tiene la misma pronunciación en todos los idiomas del mundo. Es la alabaza más antigua y la más universal.
Disfrútenla dando clic al enlace y luego llevarla a “pantalla completa”. Al final, seguramente ustedes también exclamarán… ¡Aleluya!
DIOS TE AMA Y NOSOTROS TAMBIEN.
No hay comentarios:
Publicar un comentario