Bienaventurado el hombre a quien tú, JAH, corriges,Y en tu ley lo instruyes, Para hacerle descansar en los días de aflicción,En tanto que para el impío se cava el hoyo.
Salmos 94:12-13
Todo aquel hombre o mujer que se deja corregir va a tener éxito en todo momento y en todo lo que emprenda. ¿Por qué?
Porque así como todo padre, que ya ha tenido un desarrollo como tal, que ha pasado por un proceso dónde han habido fracasos, derrotas, victorias, alegrías, quiere instruir a aquel hijo en aquellas áreas donde él fracasó para que no pase lo mismo que él o ella, o que por su experiencia sabe de qué no hay dimensionar tanto el problema, así mi Padre Celestial quiere instruir y corregir a todo hombre, porque mi Dios sabe todo, en donde me irá mal, en donde me conviene o no, etcétera.
Y sabemos que Dios quiere hacernos sonreir y bendecirnos en gran manera.
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