EL CABALLITO
Un padre llevó a su hijito
por un paseo largo en el bosque. Como era pequeño le llevaba sobre sus hombros
por mucho rato.
Luego le puso sobre sus pies y le dijo que
tendría que caminar hasta la casa. Al rato el pequeño lloraba porque estaba muy
cansado, demasiado cansado para tomar un paso más.
El padre cortó un palito y lo limpió muy bien de
toda astilla mientras el niño observaba.
Al terminar, dijo: "Mira, hijo, te
presento con tu propio caballito para que te lleve a casa." Encantado, el
niño se montó sobre su caballito y felizmente llegó a su casa. Y en casa dio
vueltas por todo el jardín hasta que tuvo que ir a bañarse y acostarse, ya
rendido.
A veces nuestro Padre nos lleva y a veces nos
deja caminar, y muchas veces creemos que ya no podemos más cuando alguien, movido
por Él, por el Espíritu Santo nos ofrece un caballito. Ese caballito puede ser:
- Una idea, una promesa,
- Una canción nueva, un cariño,
- Una oración intercesora,
- Lo que sea, y llegamos a la meta, sobre….. EL CABALLITO……
¿Necesitas
un caballito?
¿Otro hermano está necesitando un caballito? Ofrezcámoselo
con ternura, recordando nuestro propio cansancio a veces.
Eso hace toda la diferencia para un pequeño
hermano. Los jóvenes necesitan mucha ayuda de ese caballito.
En esta semana piensa:
Yo mismo seré un caballito, gozoso para llevar
en mis hombros, a mis hermanos cuantas veces sea necesario, Cuando estén
cansados o desanimados, les daré una Palabra de Poder. Jesucristo dijo: CONSUMADO ES. Juan
19:30 Todo lo podemos en Cristo, Fil.
4:1, Recibiremos Poder Hechos 1:8
Cuando necesiten que alguien los cargue, diré:
“Aquí estoy yo ” Amén.
Dios te bendiga.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario